Lo bueno de
estar atrancado en algunos aspectos de la gestión, es que la situación pugna por
replantear orientaciones tácticas, para recuperar la confianza y el compromiso
con lo que es “central” (visión, misión y, estrategia no negociables).
El sentido positivo que tiene un atolladero para desarrollar una renovada fuente
de energía superando el conflicto y saliendo adelante, es fenomenal. Si bien puede perderse un poco de ímpetu y continuidad en la transición, los beneficios a largo plazo serán siempre superiores a las perdidas de corto.
Cada vez que un gobierno supera un obstáculo, se refuerza así mismo como autoridad. La necesidad de realizar una transición en un equipo de gobierno de “alto rendimiento” se dará cuando para los verdaderos amigos luzca necesario. Se necesitan incorporar jugadores especialmente “profesionalizados”. Adeptos si; pero profesionalizados, que procedan desde fuera del equipo campeón y sus inferiores. Que sean el refresco de ambas fuentes.
Llega el tiempo de mover el banco, y aunque no haya sido advertido, el equipo sobrevivió ya antes a la salida de prominentes miembros y a la llegada de nuevos; hoy nuevamente hacen falta cambios de hombres que permitan preservar a quien representa la síntesis del liderazgo y del proyecto politico, la presidenta de la Nación.
Se viene “la final de esta copa”, Cristina ya anticipo que la sucesión sera ineludible. Un turfista diría: estamos “doblando el codo” para entrar en los 300 metros finales. Visto y entendido de esta manera será más fácil considerar la llegada de nuevos valores en el equipo gubernamental-militantes “en y de” sus profesiones, pero procedentes de otros ámbitos que los actuales (proveedores de cuadros). Esto también le dará aire al proveedor hegemonico de cuadros, al cual se ha expuesto mas de lo conveniente.
Si estos cambios suceden, los actuales integrantes del equipo de gobierno, estaran mucho mas dispuestos para recuperar el rendimiento y la mística perdida entre los grupos de trabajo. De esta manera los componentes del bloque-el corazón-del gobierno que continúe podrá percibir los cambios como “empezar de nuevo”.
Oxigeno puro para insuflar a un fatigado equipo de altísimo rendimiento que comienza a atenuar su sobresaliente aceleración.
Me parece que llego la hora de considerar hechos recientes, desde perspectivas diferentes, y agregando habilidades nuevas. Seran profesionales con trayectoria (años de potrero en toda su dimension) estos aportaran nuevos brios, desempeñaran un papel de primer orden en los próximos desafios; es decir, en la final de este largo campeonato.