lunes, 16 de agosto de 2004

Banco Central y necesidades PyME

El presidente Kirchner decidió la semana pasada un tema vital, bajó instrucciones precisas para que se preparen los pliegos con el objeto de que Alfonso Prat-Gay y Pedro Lacoste sean confirmados como presidente y vicepresidente del BCRA.La recomendación será enviada a fines de Agosto, pero Kirchner todavía no tiene los otros cuatro directores, cuyos mandatos vencen en Setiembre. Existe una gran posibilidad para cambiar el enfoque prevaleciente, antes de ahora. Si el presidente designa directores en la misma línea de pensamiento económico, es decir, consistentes con el enfoque afín a una gestión más simpática hacia la producción y el trabajo, las PyMEs pueden arrancar fuerte.La verdad es que Prat-Gay y Lacoste hicieron un buen trabajo y tienen un enfoque bien distinto que los que dominaron los períodos anteriores más prolongados. Hay mucho en juego cuando hablamos de circulares del BCRA y políticas crediticias, la fortaleza del crecimiento sustentable, pasa en buena medida por la gestión del BCRA.Argentina no tiene aún un programa integral de mediano plazo que reduzca las vacilaciones de las empresas PyMEs para invertir, pero podría ir avanzando con señales claras, a través de políticas financieras activas de orientación promocional.Frente al desafío de corregir años de inhabilitación para las PyMEs, Prat Gay y Lacoste, mas los nuevos directores deberían determinarse a tomar decisiones políticas consistentes con un enfoque de producción, exportaciones y trabajo. La economía mejoró y por eso ahora tenemos un tiempo especial para fomentar el despegue de la PyME.Hasta ahora el BCRA sugiere mejoras para la oferta a los bonistas y salir del default, pero deberá también atender también los asuntos domésticos. Esto es importante, sin dejar de hacer aquello.Mientras Lavagna recibió la delegación de responsabilidad sobre la estrategia para reestructurar la deuda sin el FMI, inmediatamente Prat Gay debería recibir la delegación de acciones para promover el crédito privado, enfocándose en los temas domésticos, que se encuentran aún muy rezagados. Para cumplir este cometido, el BCRA cuenta con el apoyo de núcleos políticos, gremiales y empresarios de la producción nacional. Ningún sector mayoritario criticará la iniciativa de impulsar circulares y líneas de crédito para la pequeña y mediana empresa.El FMI decidió postergar la tercera revisión en la dura negociación y eso es todo un tema, pero hay cuestiones acuciantes del día a día como el crédito a las PyMEs, que no puede seguir aguardando que se resuelvan los asuntos macroeconómicos. Frente al problema, Prat-Gay podría recuperar alternativas promocionales buceando en la historia, cuando nuestra industria producía y exportaba sin las limitaciones posteriores de las Reformas de 1977 y 1994. Desde la Reforma de 1994 una mega empresa mundial, y una PyME, tenían que calificar de la misma manera para obtener un préstamo, algo que complicó se manera extrema la capacidad de financiamiento de esta últimas.Las PyMEs aspiran a que el gobierno impulse circulares de promoción de exportaciones y créditos de largo plazo de las entidades oficiales como los que estaban vigentes antes de la Reforma Financiera aún de 1977. Eso sería un logro. Por eso, se debe comenzar una nueva etapa, esta vez para aumentar el apoyo a las PyMEs, que entonces podrían cambiar las actitudes temerosas de quienes sufrieron mucho hasta hace poco tiempo. Parte de la tarea ahora la tiene que hacer el BCRA, de esta manera logrará cicatrizar las heridas que quedaron de los tiempos de crisis, cuando los bancos llamaban a sus clientes para pedirles que cancelen, aún por anticipado las líneas de crédito que disponían. Se trata de una misión componedora entre el sistema financiero y el sector productivo y de servicios de la PyME.El BCRA cuenta con el compromiso del presidente, quien prometió en campaña que tendría una actitud de fomento hacia la producción y el trabajo.

No hay comentarios: