Luego de 78 meses de expansión económica a tasas chinas, la Argentina enfrenta una importante y lógica desaceleración de la actividad económica, en lo que a si misma se refiere. Los ciclos de la economía son expansivos y contractivos. No obstante la crisis financiera internacional es la causante central del fuerte cambio de escenario, que lejos de obedecer a factores domésticos, padece una involuntaria contracción emanada de un enorme shock exógeno.
La crisis internacional, estaría reemplazando desde hace unos meses, “el enfriamiento” que pedían los economistas temerosos de las altas tasas de crecimiento. De hecho, justo antes de que recrudeciera la crisis mundial, hasta principios de agosto último, esta era la conversación, de todo el arco opositor al oficialismo. Es decir, casi todos los no oficialistas. Reconocida la fecha de comienzo de la recesión oficial en EE UU (Diciembre de 2007), ahora entendemos la sobresaliente fuga de capitales que se había instalado en niveles irracionales, y el insólito ascendente nivel de riesgo país.
Con una economía que se desacelera más de la cuenta desde octubre, el PBI bajará considerablemente en el cuarto trimestre de este año.
Frente al creciente desbarajuste del cuadro internacional, el Gobierno ha incorporado un plan para impulsar la demanda agregada. En la última semana se incorporaron además, líneas de crédito a tasas subsidiadas. Son varias las razones que nos hacen ver un panorama controlado “en el margen”, al implementar las nuevas medidas crediticias para impulsar el gasto agregado, fundamentalmente porque por fin se aplica un criterio o idea directriz al crédito y no una expansión general del stock total del mismo. Pero más allá de los efectos de corto plazo, lo cierto es
que las medidas que impulsa el Gobierno tienen efectos que permitirán aguantar hasta que amaine la tormenta, si es que esto ocurre a principios de 2010. Digo si no siguen saliendo muertos desde adentro del ropero, porque con tantas mentiras y cuestiones ocultas, no terminamos nunca de saber como sigue este “western”.
Con la eliminación del sistema privado de jubilaciones se fortaleció la solvencia fiscal intertemporal del sector público y se dio un duro golpe a las versiones agoreras del mercado y las calificadoras de crédito. Ahora será el gobierno quien dirija con eficacia hacia donde se destina ese tercio del crédito que provenía de las AFJP, en forma consistente con el creciente intervencionismo estatal aplicado al mercado crediticio por todos los países serios del mundo. Todo apunta a impedir que crezcan las distorsiones en la asignación del crédito que estaba volcado exclusivamente al consumo, lo cual tiende a reducir la tasa de crecimiento potencial de la economía a mediano y largo plazo, por falta de financiamiento atractivo para la inversión.
Las intenciones son buenas.
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2 comentarios:
Comparto tus opiniones Pablo.
Gracias por pasar por mi blog. Te devuelvo la gentileza. Y además te linkié.
Muchas Felicidades en estas fiestas.
Atte.
FC
Gracias por linkearme. Pocos invierten en economistas con sensibilidad. Todo a pulmón, hay 40videos en Youtube de cuando era dificil decír en Bloomberg y CNN que Argentina crecería y no caería.
Saludos cordiales y tengas un gran 2009.
PABLO TIGANI
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