La incapacidad de predecir que las acciones de Citigroup iban a valer US$ 1,25 hace unos meses, implica mi discapacidad para asesorar al exitoso empresario Charly, acerca de lo conveniente o no, que podría ser comprar “Ciri” en este precio, de cara al futuro.
Mi amigo-desde hace 30 años-Alejandro Páez, uno de los banqueros expertos en títulos más importantes de la Argentina, esta tarde le ratificó mis reservas de pronóstico a Charly. Ayer mismo, con otro bochito amigo, Claudio Zuchovicki,-directivo de la Bolsa de Buenos Aires- compartíamos: “esto no está en los manuales, y no es lo peor que podemos esperar, aunque no sabemos que esperar, cuando, ni cuanto”.
Los errores de previsión de economistas, ahora "ex asesores de bancos y grandes empresas"; en términos acumulativos han sido tan monstruosos, que cada vez que analizo mi “banco de pronósticos”-verdaderos antecedentes empíricos-; tengo que cachetearme la cara para reaccionar. Cuando el precio del petroleo superó 140 dólares el barril, a mediados de 2008-hace 9 meses-, Goldman Sachs pronósticó 250 dólares para fin de año-hace 3 meses-, y luego llegó a caer por debajo de 40 dólares. Durante 6 años las desviaciones,-aún mensuales- han sido enormes. Pero de esto ya he escrito.
Dado que predecir la evolución del precio de las acciones de Citigroup es imposible, tenemos que acostumbrarnos a responder con un: “no lo sé”, mucho más que tratar ingenuamente de trabajar con velas, gráficos de: “apoyo al precio”, “resistencia al precio”, “cambio de dirección con triángulos descendentes”, “brecha con agotamiento”, etcétera.
De todos modos, existe la posibilidad de suscribirse a muchas publicaciones especializadas, aunque la verdad es que ya no son confiables. Durante años he tratado de estimular jóvenes profesionales para que se especialicen y sepan aconsejar la realización de una buena inversión, pero -¿Cómo entender hoy a Wall Street desde la Argentina?- En este momento no existe una forma práctica y buena de combinar los principios fundamentales para invertir, con las técnicas más sofisticadas.
Un solo consejo para dos individuos distintos: el primero, para las personas que conocen muy poco o nada acerca del mercado de acciones de los EE UU, pero siempre han deseado entenderlo e invertir allí; el segundo, para el inversor experimentado que reconoció siempre que había más para aprender, e hizo todos los esfuerzos para saber.
En este escenario, con las ciclópeas y posiblemente versátiles acciones de la administración Obama para proteger o desproteger fondos mutuales, bancos, inversionistas institucionales grandes, industrias automotrices emblemáticas de EE UU; el pequeño inversionista-digamos, con menos de 2 millones de dólares- se encuentra en absoluta desventaja. Todo esto sin contar las acciones que estarán emprendiendo a estas horas los lobbies en las sombras.
Sin embargo debo reconocer que muchos perpicaces han descubierto que se podrían hacer grandes negocios en este ambiente desafiante, y que tal vez, cuando se recuperen los fundamentals, algunos títulos podrían apreciarse de manera exorbitante.
El especulador con mayor flexibilidad de portafolio, quizás encuentre ventajas en el futuro con este tipo de riesgos; después de todo, los principios básicos no aprovecharon para nada, y las firmas de asesores de inversión han colapsado o esperan un salvataje.
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4 comentarios:
Ayer vi en la CNN en Español (que CADA TANTO miro, no por barrera ideomática con la original sino porque me divierte ver como "idiotizan" las noticias para llevarlas al nievel de un chico de 8 a 10 años) dijeron que el viernes las acciones del Citi llegaron a $1 dolar.
Realmente creo que puedo vender el TV o la heladera y con eso comprarme un puñado de acciones del Citi... aunque si lo terminan nacionalizando van a valer cero. ;)
Eso confirma mi decisión después de la crisis de 2001 de sólo tener cuentas en la banca pública o cooperativa.
En cuanto a Wall Street, y como outsider, siempre tuve una teoría personal y es que la "timba de la bolsa" debe prohibirse. Estoy a favor de la libre empresa pero empresa familiar y PYME, que no cotiza en bolsa.
Lejos de garantizar transparencia, el cotizar en bolsa hace que las empresas pierdan toda capacidad de estrategia a largo plazo, y que los accionistas vampiros, deseosos de la "curva creciente perpetua" terminen sacando CEOs porque no les gustaron las ganancias del quarter anterior. Esto se ve sobre todo en las tecnológicas del NASDAQ.
Así no hay empresa que pueda desarrollar una estrategia de largo plazo que tenga sentido.
Como dicen los yanquis "just my two cents" (worth of oppinion).
FC
Gracias, muy bueno.
PABLO TIGANI
Pablo, con este panorama en que las acciones del city suben un 33% y las del Bank of America alrededor de 11%..Cambia tu opinion? crees que es posible que en adelante se pueda mantener un crecimiento??
Por cierto, excelente blog.
S
Sincera y profesionalmente no puedo afirmar ni descartar esto. Cuando estaba en el area financiera a cargo de las finanzas corporativas, teniamos una "mesa" y los operadores solían hablar de "feeling". Mi feeling me dice....esto o aquello...Como no era nada profesional, intentaba no dejarme influir, pero debo admitir que en este contexto y en aquellos, en esta timba, mi tia Susana tiene tanta chance de acertar como Joseph Stiglitz.
PABLO TIGANI
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