¡“No debemos actuar como mujeres
con los pies atados! Si queremos que el socialismo derrote al capitalismo, no
debemos dudar en aprovechar los logros de todas las culturas. Debemos aprender
de todos los países, también de los países capitalistas desarrollados”. (Deng
Xiaoping, 1992)
La estrategia financiera de China, ha sido funcional para la Argentina, nos ha ayudado a estabilizar las reservas, el tipo de cambio y la brecha con el “dólar
blue”. Cuando en julio se negoció el swap con China por 11.000 millones de dólares, el
escepticismo permanente de una buena parte del elenco estable de “pesimistas full time”,
no daba credito, a su entrada en vigencia. En el cuarto trimestre de 2014,
con alrededor de 2.300 millones de dólares, aquella noticia se convirtió en realidad. Aquella
especulación “a la baja de divisas”, proyectaba un final para 2014, con
reservas internacionales brutas por debajo de los 25 mil millones de dólares, cuando
en realidad, luego de tres años de caída consecutiva, al final los saldos terminaron creciendo.
Como dejaba entrever Deng Xiaoping (1992), el pensaba que en algún momento, la globalización se les facilitaría un trabajo
con el propio enfoque capitalista, en términos de inversión y financiamiento. Lo cierto
es que acabamos de asistir no solo a un swap de monedas o "asiento contable", también se aprobaron
proyectos de inversión en infraestructura con financiamiento incorporado por el
gobierno chino entre los que se encuentra 4.700 millones de dólares para la
construcción de dos represas hidroeléctricas y contratos por 21.000 millones de
dólares de obra pública.
China y el mundo entero ha comenzado hace un tiempo, no
solo a reemplazar al dólar en las transacciones internacionales, sino que China viene a
disputarle la asistencia financiera en los países de la región, abordando el espacio que preliminarmente ocupaban los organismos multilaterales de
crédito (Banco Mundial, FMI). Sobre llovido, mojado; hoy sucede con el viento de cola de EE.UU. que viene revaluando el
dólar frente a otras monedas. Desde 2005 a 2013 la región recibió casi 100 mil millones de dólares en
créditos procedentes de China, alrededor de 60% del financiamiento otorgado por
el Banco Mundial mas el BID, en el mismo periodo.
Actualmente, las reservas
internacionales de China alcanzan los 4.3 billones de dólares, lo que revela una
capacidad prestable preeminente. Ya vemos claramente como la relación entre
China y Argentina no se circunscribe a una solicitud de cooperación financiera
desesperada-como se dijo por allí-,
sino a una estrategia económica capitalista de ambos países que apuntan al
largo plazo. -¿Con quien le conviene mas hacer estos negocios a la Argentina? –
¿Con el circuito anterior del FMI, la banca privada occidental, las grandes
corporaciones, o con China? - Pues entonces, pensemos en crecer sin
restricciones externas, pagando menos costo financiero y alargando la “maturity”, por
un lado y, que los chinos aumenten su “market share” por
el otro.
Leyó bien “capitalistas argentinos y
chinos”. Tengamos presente aquella célebre respuesta que le dio Deng Xiaoping a
una periodista que lo interpelaba sobre si las reformas en China no deformaban
la Revolución Cultural impulsada por el autor del Libro Rojo (Mao); la
respuesta fue: "No importa que el
gato sea blanco o negro; mientras pueda cazar ratones, es un buen gato”.
Recuerde que en la última reunión de la
CELAC, (Comunidad de Estados Latinoamericanos y Caribeños), el presidente chino
afirmó que en la próxima década las inversiones destinadas a la región alcanzarían
los 250.000 millones de dólares y el comercio exterior alcanzaría 500.000
millones de dólares anuales (+100% de crecimiento). Tenga en cuenta que los convenios
entre China y la Argentina son mucho mas flexibles que los entablados otrora con
el FMI, que las inversiones chinas vienen acompañadas con transferencia de tecnología,
aumento en el comercio bilateral, y desarrollo de proyectos de infraestructura.
Compárela ahora con préstamos a cambio de privatizaciones, austeridad,
condicionalidades, y auditorias de Anoop Singh para los desembolsos, mas tasa
de interés mucho más altas.
En suma, el progresivo entrelazamiento
entre China y Argentina-como con muchos otros países de la región y del mundo-,
estaba previsto por China, por lo menos explícitamente hace 23 años. El tiempo ha llegado, el cambio de los actores ya es un hecho,
a pesar de los nostálgicos.