Enrique Martínez asumió como Secretario de la Pequeña y Mediana Empresa. Llegó en substitución de Busso, quien regresó al Banco Nación, lugar desde el cual provenía, cuando reemplazó al ex Secretario Rozenwurcell.
El gobierno pone en funciones al cuarto Secretario de la Pequeña y Mediana Empresa de los últimos doce meses. Partiendo de la funcionaria del gobierno anterior ya suman cuatro, es decir, uno por trimestre. Este inconveniente constante ha impedido y relegado, la implementación de las medidas anunciadas.
Pyme o grande actualmente, comparten los mismos dilemas. La reducción de las ventas y la liquidez retenida por los Bancos que tienen temor de otorgar préstamos. A la PyME los plazos de cobranza se le extendieron. Los hipermercados y grandes corporaciones no le firman cheques y no le dejan descontar sus facturas, abusando de la doble vitalidad que le concede su poder de compra y las necesidades de facturación de las indefensas.
La diferencia de la grande con la PyME, es que las pequeñas no tienen saldo, ni casa matriz en el exterior.
Durante los últimos meses, el ingenio y la benignidad providencial la vienen sosteniendo. Trabajo esforzado, alianzas estratégicas, reingeniería y muchas capacidades que se desarrollan en la adversidad. No se puede decir que los empresarios PyME no estén arriesgando su resto.
Por su parte, el nuevo sustituto, podría inspirarse en los países hacia los que nuestros compatriotas están desertando.
Esas naciones de destino, sorprendentemente no escuchan abogados de productividades absurdamente discriminatorias. Los países del Norte, forman parte de los ejemplos más emblemáticos de políticas públicas diseñadas para favorecer a las Pymes.
En Estados Unidos, el capitalismo es popular, y es política de Estado hace 50 años defender a las Pymes. Bill Clinton, el paladín de la prosperidad de su pueblo, impulsó hace 4 años, la ley del
“ ombusman Pyme”, convalidando esa vocación innata del pueblo estadounidense. En España, se aprobó, una legislación especial para estimular y fortalecer jurídicamente el “Capital de Riesgo” para las Pymes.
En nuestro país, es evidente que la Secretaría del área acaba de ser desplazada políticamente hacia un espacio más reducido. Paradójicamente este año, habíamos empezado con un gobierno desenfrenado a la hora de batir el parche de las Pymes. A la postre resultó ser el mismo que le quitó la trascendencia que supo tener hasta hace doce meses. Recordemos que esta Secretaría, tenía rango de Ministerio y dependía directamente del Presidente de la Nación.
En el margen, el nuevo Secretario sustituto, tiene que concentrarse ya mismo en la siguiente agenda pendiente, antes de que se designe a su quinto colega:
· Financiamiento anunciado por el Nación.
· Créditos a largo plazo para Reingeniería.
· Rondas de impulso promoviendo Alianzas Estratégicas.
· Restitución y robustecimiento del moribundo “PRE”.
· Llamado a licitación urgente y transparente de consultoras Pymes que reemplacen a las dos exclusivas gerenciadoras anteriores, recientemente destituidas.
· Retomar las licitaciones de subsidios de tasas para Bancos.
· Poner en marcha los anunciados fondos de garantías.
· Generar un marco legal, para atraer Fondos Pymes de Capital de Riesgo.
· Distinguir y adaptar para las Pymes las normativas de uso general del BCRA.
domingo, 10 de diciembre de 2000
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